La inteligencia artificial se ha extendido de manera generalizada sobre el conjunto de las relaciones sociales y, en particular, sobre toda la actividad económica. Una especial incidencia está teniendo sobre las relaciones laborales, en todas sus vertientes, tanto individuales como colectivas. En términos generales, como suele ser habitual en la aplicación de las tecnologías al ámbito del empleo y las condiciones de trabajo. Suele tener notables efectos positivos. Pero al mismo tiempo, su implementación comporta destacados riesgos frente al ejercicio de los derechos fundamentales, la garantía de ausencia de tratamientos discriminatorios, así como de la salud y seguridad de los trabajadores. En ese marco se ha aprobado recientemente un Reglamento de la Unión Europea, conocido como “ley de inteligencia artificial”, sobre la implantación y desarrollo de la inteligencia artificial que, por su carácter transversal, va a tener un impacto decisivo sobre el ordenamiento jurídico y, en especial, en relación con el ejercicio de los poderes empresariales en el ámbito del trabajo subordinado, incluso en el terreno de la actuación de las empresas clientes en sus contratos con los trabajadores autónomos. El presente estudio intenta realizar un primer análisis sobre el contenido de este Reglamento de la Unión Europea desde la perspectiva de su impacto en las relaciones laborales.

Artificial intelligence has spread widely over all social relations and, in particular, overall economic activity. It is having a special impact on labour relations, in all its aspects, both individual and collective. In general terms, as is usual in the application of technologies to the field of employment and working conditions. It usually has notable positive effects. But at the same time, its implementation entails significant risks to the exercise of fundamental rights, the guarantee of the absence of discriminatory treatment, as well as the health and safety of workers. Within this framework, a European Union Regulation, known as the “artificial intelligence law”, has recently been approved on the implementation and development of artificial intelligence which, due to its transversal nature, will have a decisive impact on the legal system and, especially in relation to the exercise of business powers in the field of subordinate work, including in the field of the actions of client companies in their contracts with self-employed workers. This study attempts to carry out a first analysis of the content of this European Union Regulation from the perspective of its impact on labour relations.